II Juegos de Mar y Playa

Del 16 de mayo al 23 de mayo

“El miedo no es una opción” Andrea Domínguez

mayo 23, 2015
A pesar de ser la única mujer en la categoría fuerza libre de motonáutica, sus rivales no le tienen compasión a la hora de correr. Andrea Domínguez Méndez es una piloto de 21 años que a punta de pulso y valentía se ha posicionado como una de las deportistas más fuertes y destacadas sobre el agua.

Pero esta reputación fue conseguida gracias a dos personas fundamentales: su padre y su hermano mayor. De ellos recibe el apoyo día y noche y también la fuerza para exigirse al máximo. Y es que ser la hermana menor de un campeón como lo es Daniel Domínguez, aumenta la presión en cada torneo al que llega.

Desde pequeña los veía correr a la orilla de la playa y soñaba con practicar al lado de ellos, es por eso que casi a escondidas de su mamá, quien sufre cada vez que la ve correr, Daniel le alcahueteó su deseo por subirse en un jet-ski. Al lado de él comenzaron sus entrenamientos, hasta el día en que su papá, Víctor Domínguez, la mando al ruedo en una competencia en Paipa (Boyacá), donde se mezclaban todos los cilindraje, logrando sorprendentemente el primer puesto, demostrando que estaba hecha para la velocidad.

Al ver el inigualable talento que le corre por la sangre, su progenitora se unió al club de fans de ella y es ahora la encargada de manejar su imagen en cada competencia. Cascos con accesorios o diseños en su moto son solo algunas de las cosas que Andrea exhibe con orgullo. Y es que para ella la unión familiar es el secreto para lograr cada triunfo.

Aunque desde lejos, por una lesión que lo marginó de estos II Juegos de Mar y Playa, su mejor amigo, entrenador y hermano la llama todos los días para aconsejarle cómo debe tomar las curvas, las mejoras que le debe hacer a la moto o simplemente lo hace para felicitarla y darle su apoyo incondicional. “Si llego a obtener la medalla de oro él sabe que es por los dos”, dice Andrea.

“Cuando competimos juntos nos cuidamos mutuamente, siempre estamos pendientes de que una moto no le haga daño al otro. Él trata de protegerme en las carreras por más rivales que seamos, pero al llegar a la última vuelta y si estamos los dos al frente damos todo para ganar, ahí se nos olvida que llevamos el mismo ADN”, comenta con alegría y entonada voz la única representante de Cundinamarca en su categoría.

Esta misma entrega la ven plasmada sus amigos, quienes a la vez son sus rivales, “Competir con los mejores pilotos del país y saber que nadie me regala nada es mi mayor motivación a la hora de correr”. Antes de salir todos le dan ánimo, pero ya en el agua la historia es a otro precio: que sea una “niña” no es algo que les preocupe a la hora de competir, eso se demuestra en cada curva en la que tiene que luchar para no perder el control. Mejor dicho, para ella el ser mujer no es un impedimento para vencer en un deporte de hombres.

Lista items

Desarrollado por